El Servicio Nacional de Aduanas logró decomisar 1.264.619 juguetes de diversos tipos entre enero y julio del 2017; esto, como parte del trabajo de protección ante el eventual ingreso de mercancías prohibidas que pueden afectar la salud de las personas, el medio ambiente o perjudicar al comercio legal.

La Aduana de San Antonio es una de las que más decomisos ha logrado, con 418.250 unidades, seguida por Valparaíso con 360.732, Iquique con 227.145, Arica con 6.126, Punta Arenas con 2.160 y Talcahuano con 565, totalizando 1.014.978 unidades de muñecas, figuras de reconocidas licencias, peluches y rodados, entre otros tipos de juguetes.

El director nacional de Aduanas, Claudio Sepúlveda, destacó que la fiscalización de juguetes “es un claro ejemplo de cómo los funcionarios ejercen con responsabilidad su rol de protección de las personas y la salud pública, porque acá el objetivo no es sólo resguardar la economía o el comercio justo, sino que también lograr detectar juguetes de todo tipo que están hechos con bajos estándares de calidad».

Operativo en julio

Con ocasión de la celebración del Día del Niño, durante julio, se realizó un operativo de fiscalización a siete empresas importadoras de Santiago, enmarcado en el Plan Integrado de Fiscalización (PIF) para los Regímenes Suspensivos que pesquisa posibles contrabandos a partir de acabados análisis de riesgos.

El operativo tuvo como propósito verificar el cumplimiento aduanero tributario de un total 45 operaciones de comercio exterior de riesgo mediante las cuales se ingresaron al país juguetes, artículos electrónicos y deportivos de fácil comercialización por montos declarados por más de US$ 2.6 millones.

Como resultado del operativo se detectó la venta, disposición y consumo de 1.427 juguetes y productos similares sin haber pagado previamente los respectivos derechos, impuestos y otros gravámenes que las pudieran afectar, configurándose la presunción del delito de contrabando por lo que se formularon cuatro denuncias penales.

Además se cursaron a los menos 30 infracciones reglamentarias por diversos incumplimientos a la normativa para este tipo de operaciones aduaneras. El resto de las operaciones demostró un cumplimiento de la normativa aduanera vigente.