Tras un proceso de selección clínico y social, el hospital Dr. Gustavo Fricke, junto al  Servicio de Salud Viña del Mar – Quillota (SSVQ), entregaron cinco bombas de insulina a pacientes pediátricos, a través de la cobertura de la Ley Ricarte Soto, destinada a financiar 14 enfermedades de alto costo, entre ellas la Diabetes Mellitus 1 con inestabilidad severa.

El principal beneficio para los pacientes con la incorporación de la bomba de insulina es mejorar su calidad de vida y disminuir los riesgos de hipoglicemias, gracias a la monitorización constante. Sobre todo los niños pequeños, que están sometidos a tratamientos estresantes, de alto riesgo y dolorosos.

Un paciente normal debe administrarse insulina constantemente, lo que equivale a 150 inyecciones en el mes, más las punciones diarias para medir los niveles de glicemia, esto produce dolor, malestar y ansiedad en los pacientes y sus familiares.

La entrega de bombas de insulina a través de la Ley Ricarte Soto busca beneficiar a los pacientes diagnosticados con Diabetes Mellitus tipo 1 con inestabilidad severa, a contar de enero del 2017. El costo particular de la bomba de insulina con sensor en pacientes DM1 es de aproximadamente de $8.341.856.