Tras cuatro años de tramitación, la comisión de Derechos Humanos del Senado despachó durante esta jornada la Ley de Identidad de Género para su posterior votación en la Sala.

El dirigente del Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh), Rolando Jiménez, explicó que “la única buena noticia de hoy es que por fin sacamos la Ley de Identidad de Género de las garras de la Comisión, donde la iniciativa estuvo cuatro años secuestrada».

Junto a su alegría contenida, Jiménez planteó que «ahora el desafío en la Sala es que el proyecto no empeore más. Tras ello, esperamos mejorarla y perfeccionarlo en la Cámara de Diputados”.

El dirigente del Movilh lamentó que “el proyecto despachado no permite a niños trans el cambiar su nombre y sexo legal en el Registro Civil, además que obliga a las personas casadas a divorciarse para rectificar su partida de nacimiento, lo cual es impresentable».

Por último, Jiménez dijo que «sabemos que se quieren presentar indicaciones que exigen exámenes médicos para el cambio de nombre y sexo legal, lo cual es intolerable, pues patologiza a las personas trans”.