La Hepatitis G (CBV-C) es una enfermedad de transmisión sexual que, según algunos estudios, en lugar de poner en peligro a los pacientes con VIH, reduce su tasa de mortalidad en un 59 por ciento.

En un estudio publicado por la BBC asegura que los pacientes infectados con el GBV-C y con el VIH puede sobrevivir más tiempo que los que no tienen el GBV-C, pues este último estimula otras partes del sistema inmunitario para combatir activamente la infección.

Los científicos explican dicho suceso con los mosquitos, pues los microbios de que viven en sus testículos, intestino, y los huevos alimentan a las larvas, lo que ocasiona que estas crezcan más rápido. Lo mismo podría pasar con los humanos.